martes, 23 de junio de 2009
"Los zapat0s magic0s"
lunes, 22 de junio de 2009
LA LIEBRE Y LA TORTUGA
LA LIEBRE Y LA TORTUGA
En el mundo de los animales vivía una liebre muy orgullosa, porque ante todos decía que era la más veloz. Por eso, constantemente se reía de la lenta tortuga.
¡Miren la tortuga! ¡Eh, tortuga, no corras tanto que te vas a cansar de ir tan de prisa! Decía la liebre riéndose de la tortuga.
Un día conversando entre ellas, a la tortuga se le ocurrió de pronto hacerle una rara apuesta a ala liebre.
Estoy segura de poder ganarte una carrera, le dijo ¿A mi? Pregunto la liebre. Pues si a ti. Pongamos nuestra apuesta en aquella piedra y veamos quien gana la carrera.
La liebre muy divertida acepto, Todos los animales se reunieron para presenciar la carrera. Se señalo el camino y la llegada. Una vez estuvo listo, comenzó la carrera entre grandes aplausos.
Confiaba en su ligereza, la liebre dejo partir a la tortuga y se quedo remoloneando.
¡Vaya si le sobraba el tiempo para ganarle a tan lenta tortuga!
Luego, empezó a correr, corría veloz como el viento mientras la tortuga iba despacio, pero eso si, sin parar, enseguida, la libre se adelanto muchísimo. Se detuvo al lado del camino y se sentó a descansar.
Cuando la tortuga pasó por su lado, la liebre aprovecho para burlarse de ella una vez más. Le dejo ventaja y nuevamente emprendió su veloz marcha.
Varias veces repitió lo ismo, pero a pesar de sus risas, la tortuga siguió caminando sin detenerse. Confiada en su velocidad, la liebre se acostó bajo de un árbol y ahí se quedo dormida.
Mientras tanto, la tortuga seguía su camino hasta llegar a la meta. Cuando la liebre despertó, corrió con todas sus fuerzas pero ya era demasiado tarde, la tortuga había ganado la carrera.
Aquel día fue muy triste para la liebre y aprendió una lección que no olvidaría jamás. NO HAY QUE BURLARSE JAMÁS DE LOS DEMÁS. TAMBIÉN DE ESTE DEBEMOS APRENDER QUE LA PEREZA Y EL EXCESO DE CONFIANZA PUEDEN HACERNOS NO ALCANZAR NUESTROS OBJETIVOS.
martes, 16 de junio de 2009
Unas conductoras de cuidado!!
Al llegar a nuestro destino lo primero que bajamos fue la famosa cuatrimoto; después ayudamos a bajar las cosas para realizar la comida. Después el primero en subirse fue Pepe mi hermano el cual nos enseño a mi y a mis hermanas a utilizarla. Mi papá nos proporciono cierto tiempo para traer de regreso la moto y así seguirse contal de que a todos nos tocara el mismo tiempo. Todo se nos hizo fácil y pues cada una a subirnos a la cuatrimoto y regresarla en el tiempo preciso. Ya teniendo confianza con la cuatrimoto (que por cierto se me apago como tres veces) me alejaba mas y mas de lugar donde estaba la familia y subía las pequeñas montañitas que había, se sentía estupendo!!
Después de pasar Any, Sandy y yo nos fuimos caminar un rato y platicando se nos ocurrió (a mi y a Sandy) juntar nuestro tiempo para así disfrutar las tres; Any como que no le agradaba la idea pues tenia miedo ya que Sandy y yo somos muy atrabancadas pero la convencimos; y así fue las tres nos subimos ala cuatrimoto la primera en manejar fui yo ,tras de mi iba Any y hasta el ultimo Sandy nos alejamos un poco mas de lo normal, de repente nos damos cuenta Any y yo que nos hacían señas una familia pero pues ni les hicimos caso pues ni los conocíamos. Después nos dimos cuenta que nos hablaban para decirnos que Sandy la cual iba atrás colgada de espalda; a nosotros nos dio mucha risa y estábamos atacadas de la risa pues Sandy se veía como una muñeca de trapo, pare la moto y ya se acomodo ; solo que hora a ella le toco manejar y yo iba hasta atrás, seguimos nuestro camino y vimos una vereda muy inclinada pero era propiedad privada estaba casi cerca de donde estaba toda la familia, le preguntamos a papá si podíamos entrar pues solo había un una cuerda interrumpiendo el camino y nos dijo que si pero con mucho cuidado.
Y pues ahí vamos las tres subíamos y bajábamos despacio pues a Sandy le costaba trabajo la subida de la moto y luego con nostras tres pues era mucho y decidimos cambiar, ahora le tocaba a Any pero no quiso pues aun no le agarraba la onda a la cutrimoto y pues yo tome su lugar, subimos varias veces normal, pero ya teniendo en cuenta que se nos terminaba el tiempo decidimos que esos último minutos los teníamos que disfrutar pues ya no nos iba a tocar mas tiempo y fue así. Decidimos meterle toda la velocidad a la moto para subir sin tanto esfuerzo y lo logramos solo que al momento de bajar la vereda iba a ser muy riesgoso ya que estaba muy empinada pero nonos importo y decidimos bajarla lo mas rápido posible y así se hizo, en ese momento se sentía una adrenalina muy intensa; ¡¡ era lo máximo¡¡ solo que no pude frenar en al momento y nos fuimos a estampar a un árbol, nos dimos un gran susto acompañado de un grito exagerado. La moto estampo en el árbol y nosotras en el suelo caímos de inmediato, papá llego a auxiliarnos muy espantado pero al momento de ver que estábamos bien y carcajeándonos de lo que había pasado nos puso ya regañisa que jamás olvidare y desde entonces ya no nos ha vuelto a prestar su cuatrimoto!!.
Esta fue una experiencia inolvidable!!.